El dolor de cuello, conocido médicamente como cervicalgia, es una afección común que afecta a muchas personas en algún momento de sus vidas. Se caracteriza por el malestar o el dolor en la parte posterior del cuello, y puede irradiar hacia los hombros, la cabeza y la parte superior de la espalda. Esta afección puede ser debilitante y limitar la movilidad de la cabeza y el cuello.

El dolor de cuello puede tener varias causas, y es importante identificar la causa subyacente para determinar el tratamiento más adecuado. Algunas de las causas más comunes incluyen:

1. Músculos tensos o contracturados: La tensión muscular en el cuello, a menudo debido al estrés, la mala postura o la falta de ergonomía en el trabajo, puede provocar dolor.

2. Lesiones traumáticas: Accidentes automovilísticos, caídas o impactos directos en el cuello pueden causar lesiones en los tejidos blandos, como los músculos, los ligamentos o los tendones, lo que resulta en dolor.

3. Hernia de disco cervical: Esta afección implica la compresión de los discos intervertebrales en la columna cervical, lo que puede comprimir los nervios y causar dolor en el cuello.

4. Enfermedades degenerativas: El envejecimiento y el desgaste natural de la columna cervical pueden dar lugar a la osteoartritis o a la estenosis espinal, que pueden generar dolor crónico en el cuello.

5. Lesiones deportivas: La práctica de deportes de contacto, movimientos bruscos o ejercicios inadecuados puede provocar lesiones en el cuello.

6. Migrañas y cefaleas tensionales: El dolor de cabeza, especialmente las migrañas y las cefaleas tensionales, puede manifestarse como dolor en el cuello o irradiar desde el cuello hacia la cabeza.